El primer partido oficial de Diego Maradona como técnico de la Selección tuvo, como se preveía, un final feliz. El 4-0 marca a las claras las diferencias entre Argentina y Venezuela, no tanto tal vez en lo que fue el desarrollo del encuentro, pero sí en la jerarquía de los planteles. A Argentina le costó un poco abrir el camino a la victoria pero era de esos típicos encuentros en los que se presumía que una vez logrado iba derecho a una goleada.
Como era lógico, Argentina salió a hacerse dueña del trámite. Venezuela le cedió la pelota pero no tanto el terreno ya que intentó ejercer presión sobre el posedor o posible receptor de la pelota inclusive en campo del equipo dirigido por Maradona. Este accionar dio sus frutos por momentos. A la selección le costaba encontrar a sus hombres de ataque, la salida más clara era a través de Jonás Gutiérrez por el sector izquierdo y Mascherano se transformó en más de una oportunidad en el asistidor más preciso. Claro que con el correr de los minutos la presión de la Vinotinto fue mermando y si el marcador seguía en cero era porque los locales no encontraban la puntada final. Hasta que a los 26' un gran avance de Zanetti desde la izquierda encontró a Messi quien realizó una pared con Tevez que la Pulga definió con clase ante la salida del arquero. Argentina ganó en tranquilidad, Venezuela se adelantó un poco en el campo aunque sin generar peligro en el arco de Carrizo pero si algunos llamados de atención ante algunas distracciones defensivas.
El segundo tiempo es dificil de analizar seriamente porque ya el segundo gol al minuto a través de Tevez tras un gran desborde de Messi por derecha, liquidó el partido. Y encima a los 6' llegó el tercero, obra de Maxi Rodríguez luego de otro centro desde el sector derecho nacido de los pies de Agüero. Entonces Argentina reguló para evitar un mayor desgaste físico de cara al partido del miércoles ante Bolivia en la altura y además para no generar demasiada fricción teniendo en cuenta que siete de los once jugadores quedaban afuera de ese choque si se ganaban una tarjeta amarilla (Jonás Gutiérrez no logró zafar por error del árbitro). Venezuela buscó sin éxito el descuento y Agúero, en complicidad con el arquero Vega, estableció el 4-0 final.
Como era lógico, Argentina salió a hacerse dueña del trámite. Venezuela le cedió la pelota pero no tanto el terreno ya que intentó ejercer presión sobre el posedor o posible receptor de la pelota inclusive en campo del equipo dirigido por Maradona. Este accionar dio sus frutos por momentos. A la selección le costaba encontrar a sus hombres de ataque, la salida más clara era a través de Jonás Gutiérrez por el sector izquierdo y Mascherano se transformó en más de una oportunidad en el asistidor más preciso. Claro que con el correr de los minutos la presión de la Vinotinto fue mermando y si el marcador seguía en cero era porque los locales no encontraban la puntada final. Hasta que a los 26' un gran avance de Zanetti desde la izquierda encontró a Messi quien realizó una pared con Tevez que la Pulga definió con clase ante la salida del arquero. Argentina ganó en tranquilidad, Venezuela se adelantó un poco en el campo aunque sin generar peligro en el arco de Carrizo pero si algunos llamados de atención ante algunas distracciones defensivas.
El segundo tiempo es dificil de analizar seriamente porque ya el segundo gol al minuto a través de Tevez tras un gran desborde de Messi por derecha, liquidó el partido. Y encima a los 6' llegó el tercero, obra de Maxi Rodríguez luego de otro centro desde el sector derecho nacido de los pies de Agüero. Entonces Argentina reguló para evitar un mayor desgaste físico de cara al partido del miércoles ante Bolivia en la altura y además para no generar demasiada fricción teniendo en cuenta que siete de los once jugadores quedaban afuera de ese choque si se ganaban una tarjeta amarilla (Jonás Gutiérrez no logró zafar por error del árbitro). Venezuela buscó sin éxito el descuento y Agúero, en complicidad con el arquero Vega, estableció el 4-0 final.
La "era oficial"de Maradona arrancó bien, sin despeinarse, como suele calificarse a este tipo de partidos. La gente alentó al equipo y al técnico, se equivocó tal vez en reaccionar contra Verón (no hay que ser rencorosos pasaron ¡siete años!) y criticó con razón a quien hoy opta por un camino inentendible fruto de su susceptibilidad y del desconocimiento del díalogo. ¿Estará "felí"?. Allá él. Estos jugadores si lo están. Jueguen bien o mal se notan que saben que camiseta tienen puesta
Comentarios
saludos!
Saludos
estas linkeado, abrazo.
Tremendamente Motivados
Los silbidos a Veron me parecieron de cuarta. De gente que no razona.
Un saludo.
www.dalepelota.blogspot.com
no he visto los gole todavia,pero estoy ansioso por verlos jaaja
grande Messi y grande el diego!!
un abrazo!!
Victoria contundente con un buen Messi, heredero de la camiseta "10" de Argentina.
saludos
sílvia