BOCA EMPEZO A DAR LA VUELTA

Boca se quedó ayer con medio campeonato. La victoria 3-1 ante San Lorenzo le posibilita hasta perder por un gol ante Tigre el martes y alzarse con el Torneo Apertura 2008. Con este resultado el Ciclón, que si ganaba era campeón, se quedó sin chances de lograr el título.

No se vio ayer nada distinto al pobre nivel futbolístico exhibido durante el torneo. Salvo por los nervios de los protagonistas ni siquiera hubo clima de final en la mayor parte del encuentro, ayudado también por la inexplicable resolución de la organización de limitar el acceso del público permitiendo que en varios sectores la cancha luciera desierta. San Lorenzo, seguramente por el lógico cansancio físico tras la seguidilla de partidos, recién entendió lo que se estaba jugando luego de alcanzar el empate de milagro, por obra y gracia del tremendo error del arquero García tras un derechazo de Solari. Boca, sabiendo de antemano que le quedaba un cotejo y el empate podía no ser un mal resultado, fue cauteloso y prácticamente no inquietó a Orión en el primer tiempo. Hasta el tanto de Viatri lo más trascendente había sido el susto que provocó el terrible choque de cabezas entre Silvera y Forlín que le costó la temporaria perdida del conocimiento a ambos. De llegadas de peligro poco y nada.

En la segunda parte San Lorenzo, ante la adversidad del resultado, tomó la iniciativa, controló más el balón pero no inquietó a Boca hasta que se encontró con el mencionado gol de Solari. A partir de entonces el partido ganó algo de emoción y cuando parecía que los de Russo estaban mejor que su rival, un saque rápido de García llegó a Dátolo que la bajo con categoría y envió un centro preciso a Riquelme quién la tocó al medio y habilitó al ingresado Palacio que estableció la ventaja. El 1-2 descontroló a San Lorenzo que sufrió así las expulsiones de Aguirre y Bergessio y se desentendió del certamen ya que tendría que haber cerrado el encuentro teniendo en cuenta que ese resultado lo mantenía aún con vida (un 1-0 de Tigre a Boca le daba el título por goles a favor). Sin embargo permitió que Boca ampliara la ventaja que lo sacó de la conversación mediante un zurdazo cruzado de Chávez.

El martes se cerrará el Apertura. Boca tiene todas las de ganar. Tigre nada que perder. Habrá que ver quien siente más las ausencias. Si Boca las de Riquelme y Vargas (llegaron ayer a la quinta tarjeta amarilla en dos jugadas muy discutibles) ó Tigre las de Islas y Castaño. No sería nada de extrañar, dada la paridad del torneo, que el xeneixe se consagrara campeón perdiendo por un gol. Los de Diego Cagna intentarán que la diferencia sea de dos para escribir una página gloriosa en la historia del fútbol argentino. Una historia que pase lo que pase ya les tiene reservado un capítulo especial.